Cada año, alrededor de 9.000 personas mueren en Bolivia a causa de la tuberculosis (TB), según datos del Ministerio de Salud y Deportes. Los departamentos más afectados son La Paz, Santa Cruz y Cochabamba, donde se concentra entre el 65% y el 70% de los casos.

Se trata de una patología infecciosa causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis, que afecta principalmente a los pulmones y se transmite por el aire. "Si respiras aire contaminado con los gérmenes, puedes contraerla", explica la doctora Carla Vásquez, infectóloga y docente de la Universidad Franz Tamayo (Unifranz).

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2023 se reportaron 10,8 millones de casos en todo el mundo. A pesar de su alta incidencia, la tuberculosis es prevenible y curable. En Bolivia, los médicos resaltan la importancia de la educación y la concienciación para reducir el estigma y fomentar un diagnóstico temprano.

En los últimos años se han implementado avances significativos en diagnóstico y tratamiento, como la prueba Xpert MTB/RIF, que permite detectarla de manera rápida y precisa. Además, nuevos regímenes terapéuticos más cortos y menos tóxicos han mejorado las tasas de curación, especialmente en casos de tuberculosis resistente.

A pesar de estos avances, Bolivia sigue enfrentando una alta incidencia. "La tuberculosis en nuestro país es una de las principales causas de enfermedad y muerte, afectando especialmente a grupos vulnerables", señala Vásquez.

El Ministerio de Salud destaca que más de 68.000 personas han sobrevivido gracias a un diagnóstico y tratamiento oportuno. Estrategias como la vigilancia de la resistencia bacteriana, nuevos esquemas terapéuticos y la educación sobre el uso adecuado de medicamentos son claves para continuar avanzando en la lucha contra ella.