La insuficiencia renal crónica, hepática, cardiaca, pulmonar, entre otras. Son condiciones que, con el desarrollo gradual hacia sus estadios avanzados, generan múltiples complicaciones y descompensaciones en el organismo. Es por lo que el trasplante es la única solución que restablece la función de los órganos afectados, al margen de las complicaciones inherentes de la propia cirugía como puede ser el rechazo, infecciones y neoplasias a largo plazo.

El director del Hospital Santa Bárbara, doctor Sandro Gareca quien también fue parte del equipo quirúrgico que realizó este procedimiento, comenta que “el proceso preoperatorio se inició a tempranas horas de la jornada, se conformaron dos equipos de profesionales médicos y la coordinación entre ambos permitió que, tras siete horas de cirugía, permitiera que ambos jóvenes se encuentren estables y en cuidados intensivos”.

El cirujano cardiovascular, Daniel Ordóñez, afirma que se siente muy satisfecho por el trabajo que realizó junto a todo el personal que intervino el trasplante de riñón y demuestra que Bolivia cuenta con profesionales especializados para ese tipo de intervenciones.  

“Desde ahora en adelante vamos a continuar con la tarea de darle esperanzas a nuestros habitantes, debemos concentrarnos en acciones en medidas preventivas sin descuidar la importancia medica que están orientadas a devolverle salud al pueblo”, señala el ministro de Salud y Deportes, doctor Jeyson Auza.