Prevención del cáncer prostático
Según datos publicados en 2018 por la Organización Mundial de la Salud, Bolivia ocupa el lugar 112 en el mundo de mortalidad por esta afección siendo de 14,13% por 100.000 habitantes.
Esta enfermedad corresponde al crecimiento de células tumorales dentro del tejido prostático normal, con características de crecimiento acelerado, posibilidad de invadir órganos vecinos o de generar metástasis.
Uno de cada 10 hombres puede padecerla, sobre todo con el aumento de la edad o presencia de antecedentes familiares. “Es una enfermedad silenciosa, en etapas precoces e incluso cuando está un poco avanzado no da síntomas. Es por lo que se sugiere la prevención a los pacientes asistiendo a chequeo una vez al año, para ver la salud prostática. Si esta se detecta en las primeras etapas de crecimiento, es totalmente curable”, comenta el doctor Fabrizio Rosazza, urólogo de Clínica los Andes.
En la actualidad se cuenta con herramientas para mantener la salud del afectado sin complicaciones, así como también exámenes preventivos como el antígeno prostático, el cual tiene un alto índice de exactitud, sin embargo, si existe sospecha de cáncer, este debe ser complementado con tacto rectal. Otros métodos son la biopsia, scanner o resonancia nuclear magnética.
Una vez diagnosticado se constata si el tumor está localizado solo en la próstata o si ya se extendió a órganos vecinos y/o dio metástasis. Según eso, los tratamientos son: cirugía extirpando la próstata por completo; radioterapia; manejo con medicamentos que suprimen la testosterona en el cuerpo frenando el crecimiento de las células tumorales y consiguiendo mantener al paciente con una buena calidad de vida.
Se recomienda iniciar controles a los 40 años si existen antecedentes familiares, en caso contrario se aconseja retrasar cinco años su inicio de chequeo.
