Las unidades de terapias intensivas cuentan con personal capacitado y especializado para llevar a cabo funciones muy determinadas. Sin embargo, no es el único factor que genera calidad en la atención para el bienestar de quienes se encuentran internados. También es necesario tener en cuenta el entorno ambiental y físico de los recintos, dentro de ellos el equipamiento que poseen.

A raíz de lo anterior y con el objetivo de reforzar el sistema de salud, el Ministerio de Salud y Deportes, entregó a los departamentos de Chuquisaca, Santa Cruz y Hospital San Juan de Dios de Tarija unidades de terapia intensiva de alta tecnología.

Respiradores, bombas de infusión volumétrica, equipo de aspiración de secreciones, reanimadores y monitores multiparamétricos son parte del implemento que beneficiará la atención de personas adultas, adultos mayores, pacientes pediátricos y neonatos. 

“Si bien está pensado principalmente como refuerzo para hospitales ante cualquier enfermedad que requiera de estos instrumentos, todo aquel que se vea afectado por SARS-CoV-2 podrán tener de igual forma una oportuna y eficaz atención. Es necesario estar preparados para cualquier escenario”, comenta el ministro de Salud, Jeyson Auza.

La infraestructura aporta grandes beneficios psicológicos y físicos, haciendo así que las personas mejoren su experiencia dentro de los recintos de salud. Se podrá disminuir el estrés, ansiedad y presión, permitiendo que los internos de los hospitales puedan tener una recuperación más rápida y efectiva. Junto con ello, el personal capacitado podrá desarrollar de manera más tranquila sus labores. “Por eso, nuestro objetivo es seguir fortaleciendo los establecimientos de salud”, concluye.