Los estudiantes, desde el primer semestre, desarrollan competencias como el diseño de programas de salud comunitaria, diagnóstico de enfermedades, realización de procedimientos quirúrgicos y aplicación de medidas preoperatorias y posoperatorias. Estas competencias se refuerzan y aplican de manera más profunda durante el internado, preparando a los alumnos para los desafíos de la práctica médica.

Bajo este contexto, la doctora Griselda Vargas, directora de medicina de Unifranz La Paz, destacó que para cumplir con éxito este periodo se necesita poner en práctica la ética e integridad en cada interacción médica, mantenerse al tanto de las últimas evidencias científicas y participar en sesiones académicas y talleres prácticos.

“El internado rotatorio en la Universidad Franz Tamayo (Unifranz) es un proceso académico práctico e indispensable en la última etapa de formación de los estudiantes. En esta fase se desarrolla la capacidad de sostener una relación adecuada con el paciente y poner en práctica todo lo aprendido”, explica la doctora Mariana Andrea Tapia, coordinadora del internado.

Cabe destacar que, recientemente, la carrera de medicina fue acreditada, lo que garantiza educación de calidad y establece un estándar regional que impulsa una mejora continua en los procesos de enseñanza y aprendizaje.