Cuando tragar se convierte en una odisea
La dificultad crónica en la deglución puede resultar en pérdida de peso, atragantamiento y provocar que la comida llegue a los pulmones.
Muchas personas experimentan la incomodad de que un alimento o bebida se vaya accidentalmente por el lugar equivocado durante la deglución. Sin embargo, muchas veces este problema se vuelve crónico y puede ser señal de una enfermedad que debería tratarse.
La disfagia es un problema de deglución y las causas pueden ser muy variadas. Se pueden identificar tres factores: la parte estructural en la que un acto, por ejemplo, una cirugía, que altera el tracto aerodigestivo superior por un problema puramente mecánico. En un segundo lugar, pacientes que tienen una enfermedad neurológica que produce una alteración de la fuerza o de la coordinación de la deglución y aquellos que padecen patología crónica, aguda o grave que hace que estén varios días sin poder comer provocando una atrofia del sistema de deglución.
“La acción de comer puede parecer algo simple, pero deglutir es en realidad una operación compleja en la que participan muchos nervios y músculos. Cuando estos no funcionan bien, los alimentos pueden no moverse como deberían a través del tracto digestivo y como consecuencia, se atascan o acumulan en la garganta o esófago”, comenta el doctor James East, gastroenterólogo de Clínica Mayo en Londres.
El diagnóstico de disfagia crónica puede requerir radiografías, endoscopia, medición de la presión esofágica y tomografías computarizadas. Junto con ello, el tratamiento puede incluir fisioterapia, cirugía, medicamentos y cambios en la alimentación inclusive el descartar alimentos con ciertas texturas y limitar o eliminar el consumo de cafeína y alcohol.
Entre los nuevos tratamientos se incluye la miotomía endoscópica peroral (POEM, por sus siglas en inglés), donde se reemplaza la cirugía laparoscópica tradicional para liberar el espasmo de los músculos esofágicos por una técnica endoscópica menos invasiva que se realiza completamente a través de la boca.
