La luz nocturna se correlaciona con el cáncer colorrectal
Los resultados de esta investigación concluyen que la exposición al espectro de luz azul o fría podría elevar la presencia de este tipo de tumores en la población.
El trabajo de noche, la exposición a la luz artificial nocturna (ALAN, por sus siglas en inglés) y, en particular, al espectro de luz azul y la consiguiente alteración circadiana pueden acrecentar la presencia de cáncer de mama y próstata. El peligro de cáncer colorrectal también podría incrementarse entre este tipo de trabajadores.
Investigadores españoles analizaron el vínculo entre la exposición a ALAN según el espectro de luz y el cáncer colorrectal entre sujetos que nunca habían trabajado de noche en un estudio poblacional de casos y controles. Se examinó información sobre 661 casos de cáncer colorrectal verificados histológicamente y 1.322 controles, entre 2007 y 2013. La exposición exterior se basó en imágenes de la Estación Espacial Internacional, y se incluyeron datos sobre la intensidad de la luz ascendente detectada de forma remota. Se estimaron los odds ratio (OR) ajustados e intervalos de confianza (IC) para la luz visual, la luz azul y las sensibilidades espectrales de los cinco fotopigmentos humanos según la residencia geocodificada de los participantes.
La exposición al espectro de luz azul se asoció positivamente con el cáncer colorrectal (OR = 1,6; IC del 95%: 1,2-2,2; tercil más alto frente a más bajo). Los OR fueron similares (OR = 1,7; IC del 95%: 1,3–2,3) cuando se ajustó por estado socioeconómico del área, los patrones de dieta, el tabaquismo, sueño y antecedentes familiares. No se observaron vínculos para la luz visual exterior (espectro completo) (OR = 1,0; IC del 95%, 0,7-1,2; tercil más alto frente a más bajo). El análisis de los cinco fotopigmentos arrojó resultados similares con un mayor riesgo para las longitudes de onda más cortas y el espectro azul y no para las longitudes de onda más largas.
Finalmente, la exposición al espectro de luz azul al aire libre, cada vez más frecuente en los últimos años, puede estar asociada con más peligro de cáncer colorrectal.
