Geriatría
Internet reduce los estados depresivos en los ancianos
Estos datos representan nuevas contribuciones a la investigación sobre el uso de Internet y el bienestar mental de los adultos mayores.
La depresión es un grave problema de salud en adultos mayores. La condición tardía afecta entre 5 y 10 millones de estadounidenses que tienen más de 50 años, con casi el 8% de la población con informes depresión. El porcentaje es aún mayor, aproximadamente el 20%, al examinar el diagnóstico de por vida para la depresión, algún tipo de trastorno mental o síntomas depresivos clínicamente relevantes.
El propósito de este ensayo (Departamento de Telecomunicaciones, Estudios de la Información y Medios de Comunicación de la Universidad del Estado de Michigan, Estados Unidos) fue examinar la relación entre el uso de Internet en adultos mayores jubilados y los cambios en un indicador de uso frecuente para la depresión (el CES-D). Los autores evaluaron si un determinado índice para la depresión se veía afectado por los valores anteriores del índice y de Internet. La muestra incluyó a 3.075 encuestados observados durante 4 oleadas de datos, dando un total de 12.300 observaciones. Se analizó el efecto sobre la depresión presente y pasada de Internet en una muestra completa y una pareada. También se llevaron a cabo pruebas informales para los factores de confusión. Por último, se pudo probar un modelo básico de mediación para determinar si Internet afectaba la depresión a través de su relación con la soledad y el aislamiento social.
A través de los métodos, se encontró una contribución positiva del uso de Internet para el bienestar mental de los adultos mayores jubilados en los Estados Unidos, donde el efecto disminuía la probabilidad de un estado depresivo en un tercio. No se encontraron pruebas de confusión.
Finalmente, el modelo dinámico indicó que en ancianos, Internet reduce la probabilidad de un estado de depresión en un 33%. El número de personas en el hogar intervino parcialmente en esta relación, con una disminución de la condición en personas que vivían solas. Esto proporciona evidencia que el mecanismo que relaciona el uso de Internet en la depresión es la mejora del aislamiento social y de la soledad. Estimular a los ancianos para que utilicen las herramientas de la Red puede ayudar a disminuir el aislamiento y la depresión.
