NEUMOLOGÍA PEDIÁTRICA
C o n t e n i d o d i s p o n i b l e e n h t t p : / / www. n e umo l o g i a - p e d i a t r i c a . cl 318 Urgencia pediátrica: la primera línea de atención hospitalaria del paciente pediátrico con virus SARS-COV-2 Neumol Pediatr 2020; 15 (2): 317 - 323 mitad no tenían fiebre y sólo leves síntomas respiratorios (5) (6). SARS-CoV-2 puede causar síndrome febril sin foco en el lactante y recién nacido, meningoencefalitis, Guillian Barré, manifestaciones oculares (conjuntivitis) y casos de acro- isquemia aguda. ORGANIZACIÓN DEL FLUJO DE PACIENTES EN URGENCIAS Las recomendaciones en los flujos de urgencia para evitar contagios entre pacientes y personal de salud han emanado fundamentalmente de expertos en infecciones intrahospitalarias, infectólogos y de personal de SU (3) (7) (8). 1. Al ingreso al hospital, idealmente debería haber un pre- triage donde un funcionario apostado en la entrada pregunte por presencia de fiebre y síntomas respiratorios, para así dividir el flujo de pacientes en dos áreas totalmente separadas. Es recomendable que ingrese el paciente con un solo acompañante. Habrá dos áreas: a. Área de pacientes con sospecha de CoviD-19 b. Área No respiratoria: pacientes con otros motivos de consulta. Desde el pre-triage se dirige al paciente al triage correspondiente. 2. La enfermera o técnico paramédico de triage instala una mascarilla quirúrgica al paciente y a su acompañante, lo evalúa y categoriza determinando un tiempo para ser visto por el médico, como cualquier otra consulta de urgencias. Luego, el paciente es enviado al área correspondiente para su atención o a una sala de espera específica para problemas respiratorios con separaciones de al menos un metro de otro paciente. 3. Para lograr evitar contagios, es necesario tener también distintos equipos sanitarios para la atención, es decir técnicos, enfermeras y médicos que trabajen independientemente en cada área. 4. El personal de pre-triage y triage debe estar protegido con mascarilla quirúrgica y guantes no estériles. Todo el personal de urgencias debe usar en todo momento mascarilla quirúrgica, independiente si está en las salas respiratorias o no, y cada 4-6 horas deberá cambiársela o antes si se humedece. Los estudios son claros en demostrar la capacidad de protección de la mascarilla quirúrgica contra el virus CoV2 en situaciones no generadoras de aerosoles (9). Se ha descrito que alrededor del 30% de los profesionales de la salud se contagiaran (10), por lo que el cuidado es clave para evitar quedarse con insuficiente personal para la atención de los enfermos. ATENCIÓN EN BOX DE PACIENTE SOSPECHOSO DE CoVID-19 Debe ser idealmente individual, con puertas cerradas. Al ingresar al box, un técnico paramédico que cuenta con protección de contacto y gotitas (delantal de plástico, guantes no estériles, mascarilla quirúrgica), controlará los signos vitales del paciente. El médico atenderá con precaución de gotitas y contacto, además de antiparras o máscara facial por la posibilidad de generarse aerosoles que contengan el virus, al examinarlo estrechamente. Existen protocolos filmados para el uso correcto de EPP (11). El box debe contar con un estetoscopio, otoscopio, bajalenguas y conos desechables. El médico determinará si cumple el criterio de caso sospechoso, si es así, indicará toma de RT-PCR para el diagnóstico de COVID-19 e indicará eventualmente otros exámenes según estime conveniente para un correcto tratamiento del paciente. Una vez dado de alta el box de atención requiere aseo terminal. Se ha descrito que el virus es capaz de quedar en los objetos inertes por largas horas por lo que es necesario limpiar todas las superficies con amonio cuaternario o alcohol isopropílico al 70% o más (12). Presentación clínica Hasta el momento, la mayoría de los casos descritos en pediatría son leves, pero serán una fuente de contagio para mayores que pueden tener cuadros graves e inclusive letales. Lo interesante es que, al contrario de los adultos infectados, menos del 50 % de los pacientes pediátricos tienen fiebre y/o síntomas respiratorios, es muy frecuente que sean asintomáticos, lo que dificulta el control de la propagación del virus. Se han clasificado los síntomas en 4 categorías de gravedad (5) (6). - Leve: tienen un poco de tos seca, escasa rinorrea, estornudos, fiebre baja, malestar en general, mialgias y odinofagia. Al examen sólo habrá congestión faríngea y una auscultación pulmonar normal. Otros sólo tendrán náuseas, vómitos y diarrea. - Moderado: éstos son los que tienen neumonía, fiebre, tos seca que luego se hace productiva, sibilancias y crepitaciones, pero no están hipoxémicos ni polipneicos . Otros no tienen síntomas ni signos clínicos, pero sí neumonía a la radiografía o scanner pulmonar - Grave: con síntomas respiratorios, tos, fiebre desde el inicio y a la semana comienzan con disnea y dificultad respiratoria, saturación de oxígeno < 92% y otros signos de hipoxemia. - Críticos: comienzan con síntomas respiratorios y rápidamente progresan a una insuficiencia respiratoria, SDRA asociado a shock, miocardiopatía, coagulopatía, encefalopatía, falla renal. Toma de examen Será realizada por el personal de enfermería que tomará el examen de RT-PCR para virus CoV2 a través de un hisopado nasofaríngeo, con precauciones aún mayores que las descritas anteriormente, considerando que tendrá contacto con secreciones del paciente: precauciones de contacto y respiratorio con mascarilla N-95 (filtro de alta eficiencia), gafas o antiparras, delantal desechable y guantes. La toma de muestra del hisopado nasofaríngeo puede enviarse al Instituto de Salud Pública (ISP) con formulario ad/hoc con doble caja de protección o en ciertos centros privados se cuenta con el examen certificado por el ISP, por lo que se puede tomar el del centro y nada más. El resultado del examen estará en 1-2 días
RkJQdWJsaXNoZXIy MTYwMjk1